Decisiones.- En tiempos difíciles, como estos que vivimos, los humanos buscamos la forma de encontrar sentido a la vida. Nos encontramos en periodo de distanciamiento social, pero siendo seres sociales; el sentimiento de soledad y estrés hacen nuestra vida complicada y tenemos la percepción de que el tiempo pasa lento.
Buscamos motivación en todo aquello que no imaginamos, observamos nuestro camino recorrido y nos replanteamos nuestra misión en este mundo y dentro de todo ello observamos nuestro círculo de seres amados, entonces encontramos a quien nunca se va de nuestro lado “nuestra mascota” quienes son un apoyo incondicional, ellos siempre están para escucharnos, comprendernos y amarnos, después de todo como decía Anatole France: “Hasta que uno no ha amado un animal, una parte del alma sigue sin despertar”.
En innumerables situaciones difíciles en la historia del humano, los animales han sido nuestro apoyo directo o indirecto, tal es el caso de Frida y Titan perros que apoyaron en el rescate de 78 personas del sismo en México en 2017, o Hachiko el perro incondicional del profesor Hidesaburo Ueno la década de los años 20’s.
Nuestros animales siempre están en las situaciones más difíciles; nuestras mascotas nos esperan día con día para recibir una caricia o un cumplido y nos dan sus mejores años, pero en cambio ¿Que les hemos aportado nosotros a nuestros animales?, ¡cada quien lo sabrá!.
Nuestros animales son el reflejo de lo que somos. Si los tratamos con amor; si los ignoramos o maltratamos se asustan y nos amenazan o incluso nos protegen marchándose. Es momento de reflexión.
Es momento de repensar el mundo y nuestra interacción con los seres que están ahí día con día, amándonos y aportando lo mejor de sí, es en nuestros hogares o incluso en las calles donde tenemos una Frida o un Titan esperando ser vistos y amados por el humano, es hora de retribuir el amor que nos brindan pase lo que pase, después de todo como dice James Herriot : “Si tener alma significa ser capaz de sentir amor, lealtad y gratitud, los animales son mejores que muchos humanos”.